1/10/2019
Rubenshuis, Amberes


Ambos pintores fueron muy conocidos y valorados en su época, aunque la casa de Rubens, un verdadero palacio de gusto italianizante con pórticos, jardines con pabellón de descanso, galería de arte y estudio, resulta mucho más opulenta que la de Rembrandt en Amsterdam, más propia de un rico holandés protestante. En una de sus estancias domésticas, este lienzo sobre una puerta de paso me subyuga al instante. No he logrado saber si es de la época del pintor o más reciente, es una de esas obras que diríamos fuera del tiempo, desconocidas o, al menos, poco conocidas, pero que tienen algo que hace que uno se detenga a mirarlas y a preguntarse no ya quién la pintó, sino sobre todo quién es la mujer que muestra y qué hace, o qué le ocurre. En la habitación adyacente, en apariencia, un guardia también dormita.

Comentarios